Estado por adquisición: su poder se basa en la sumisión de los individuos, a quienes se les imponen normas basadas en intereses particulares.
En este estado, el soberano es libre de incumplir las normas si así lo desea, este no puede ser juzgado ni castigado. Así como tampoco se le puede quitar el poder.
Dominio por conquista y por generación.
El dominio por conquista se da a través de guerra, en este caso es el vencedor quien toma el puesto de soberano.
El dominio por generación se basa en un contrato, el cual rey tiene sobre su hijo como padre. Mediante este contrato, el poder es otorgado al hijo del rey cuando sea necesario.
Capítulo 21
La libertad no es más que la ausencia de inpedimento.
La libertad, el miedo y necesidad son conceptos entrelazados unos a otros. El miedo y la necesidad del hombre no lo deja ser completamente libre.
Cada persona es autora de sus propios castigos, absolutamente nadie puede ir en contra de las leyes de la naturaleza, que son las que el soberano, por medio de Dios, impone.
No se puede tener la libertad de contradecir al Estado, ya que aquella acción terminaría perjudicando a la esencia de este.
Existen normas que no están escritas ni son castigadas y que todos tienen la libertad de decidir si cumplirlas o no.
Si un monarca renuncia a la soberanía y a la de sus generaciones, los súbditos no se ven más obligados a cumplir lo que designó durante su gobierno.
Capítulo 22
El estado está conformado por sistemas regulares e irregulares.
Los sistemas regulares pueden ser absolutos o dependientes, siendo los regulares aquellos en los que los súbditos están bajo el poder exclusivamente de su representante y los dependientes aquellos en los que, incluso quien los regula, es súbdito de un soberano.
En los irregulares tenemos a los políticos y privados. Los políticos son gobernados por el poder del soberano y los privados gobernados por algún súbdito autorizado por un extranjero.
La palabra provincia significa un encargo o cuidado de negocios. En este caso, el gobernador se encarga también de las provincias, es decir, hace cumplir sus normas en dichos lugares y, quienes se vuelven súbditos, aceptan ya que tienen necesidades, como lo es vivir en armonía.
Los romanos gobernaban la provicia a través de presidentes y pretores.
Capítulo 23
El ministro público es un empleado contratado por el soberano que tiene como objetivo representar el poder del gobierno dentro de un negocio.
Algunos ministros públicos pueden llegar a encargarse de un estado en su totalidad o en parte, en caso sea necesario. Otros están encargados exclusivamente de lo econócimo, ya sea en el territorio o en el extranjero.
Un ministro público también puede ser quien está encargado del ejército, quien enseña a los súbditos acerca del poder del soberano, quien se encarga de la administración de la justicia y quien representa al soberano gobernando en el extranjero.
Capítulo 19
El representante de un gobierno tiene que ser, necesariamente, un hombre o un grupo de hombre.
Existen tres tipos de gobiernos, los cuales se diferencian en sus objetivos y en su capacidad para mantener la paz dentro de un estado.
Monarquía
Cuando un gobierno es dirigido por un solo hombre.
Democracia
Cuando es dirigido por un grupo de personas, uno en el que cualquier persona es libre de entrar.
Aristocracia
Se trata de un grupo exclusivo de personas en el poder.
Capítulo 18
Todo estado tiene un soberano, quien se encarga de asignar las normas y decidir qué es legal y qué no lo es.
El gobierno es un contrato, ninguna persona debe hacer algo que vaya en contra de la norma.
El soberano regula el cumplimiento de las normas, toda acción que las incumpla termina en castigo.
Dicho soberano, no debe realizar nada que vaya en contra de dichas normas, puesto que es él quien debe proteger el cumplimiento de estas.
El honor es algo fundamental para el hombre y es el soberano quien se encarga de decidir a qué personas se le es dado.
Capítulo 17
Existen dos tipos de Estado: Estado Político y Estado por adquisición.
Estado como institución: tiene como fin asegurar la armonía dentro de una sociedad, conformada por individuos libres por naturaleza, a través de normas.
El miedo a la muerte y la necesidad del hombre libre por querer proteger su conservación, los lleva a un acuerdo político.
En dicho acuerdo político, se le designa a una persona o un grupo de personas velar por la paz dentro de un territorio. La armonía se logra a través de normas, las cuales limitan al hombre libre.